Un calefactor de estacionamiento tiene la función de calentar el interior de un vehículo sin depender de la potencia calorífica del motor.
Existen básicamente dos tipos de calefactor de aparcamiento:
Los calefactores de estacionamiento por agua se suelen utilizar en los coches modernos. Gracias a su tamaño compacto, son fáciles de instalar en el compartimento del motor.
¿Cómo funciona un calefactor de estacionamiento por agua?
En comparación con el calefactor de estacionamiento de aire, el calefactor de estacionamiento de agua tiene la ventaja de que también calienta el motor y, por tanto, garantiza un mejor comportamiento de arranque.
Los calefactores de estacionamiento por aire suelen instalarse en camiones y autocaravanas. Se instalan principalmente en el interior de la cabina. Aspiran el aire de la cabina mediante un ventilador y lo calientan.
Los calefactores de estacionamiento pueden activarse mediante un temporizador o a distancia. El control remoto es posible por radio o smartphone.
Especialmente en la estación fría, los calefactores de aparcamiento garantizan que los cristales del coche se desempañen a tiempo para la salida y no se empañen. De este modo se obtiene una visión clara de la carretera.
Además, todos los calefactores de estacionamiento cumplen diversas normas de seguridad para que la seguridad de funcionamiento esté siempre garantizada.
Un arranque en frío supone para los motores de los coches un esfuerzo similar al de conducir 70 kilómetros por autopista. En muchos vehículos, un moderno calefactor de estacionamiento por agua no sólo calienta el interior, sino también el circuito de refrigeración del motor. Esto evita la fase de arranque en frío, que causa mucho desgaste, y ayuda a mantener el valor del vehículo.
Los modernos calefactores de estacionamiento por agua no sólo calientan el interior, sino también el circuito de refrigeración del motor en muchos vehículos. Un motor precalentado requiere mucho menos combustible al arrancar, ya que se omite la fase de arranque en frío o calentamiento del motor.
Las emisiones contaminantes se reducen en torno a un 60 % durante el arranque en caliente. La reducción de contaminantes es, por tanto, uno de los argumentos a favor del uso de un calefactor de estacionamiento.
La llama continuamente encendida de los modernos calefactores de estacionamiento a base de agua también permite una combustión casi ideal con emisiones de escape muy bajas.